Las tertulias políticas de la televisión tienen dos funciones fundamentales:
- Promocionar (a modo de campaña electoral permanente) al partido político que defiende los intereses económicos y políticos de quienes controlan (a través de la financiación) el canal de televisión de turno (El PP en Telemadrid, el PSOE en La Sexta, etc.)
- Reducir el debate (como si incluyera el todo) a cuestiones triviales, presentando (como si estuvieran representados todos los puntos de vista) una única opción con pequeños matices intrascendentes, para presentar como legítimas (y no ideológicas) las políticas impuestas (son las únicas posibles).
Tomando como ejemplo los diferentes debates que tuvieron lugar en TVE, Telemadrid, CNN+, 24h, etc. en torno a la reforma laboral, pudimos comprobar que la cuestión sobre la que giraba la discusión no era “¿Por qué la reforma?” sino “¿Por qué es necesaria la reforma?” Cuando hablaron de la huelga general del 29-S, no lo hicieron presentando los motivos y las propuestas alternativas sino los “motivos” por lo que la huelga iba a ser un "fracaso" (a nadie podía extrañar por lo tanto que poco después los sindicatos mayoritarios consideraran que ya habían hecho bastante el paripé y que ya podían ir a lo suyo firmando la reforma de las pensiones: finalmente habían entrado en razón, habían madurado, se habían hecho responsables).