Estados Unidos ya ha movilizado sus barcos de guerra para una probable intervención militar en Libia. Hillary Clinton lo ha explicado:
La jefa de la diplomacia estadounidense destacó que "es mucho lo que está en juego". "Toda la región [de Oriente Próximo] está cambiando y una respuesta fuerte y estratégica estadounidense será esencial", resaltó.
Lo ha explicado mejor de lo que hubiese querido, olvidándose tal vez de que se encontraba en presencia de periodistas. O es que, tal vez, ya no hace falta ni guardar un poco las maneras... O, incluso, tal vez también, tenía especial interés en que quedaran claras sus intenciones a modo de aviso a navegantes...
En cualquier caso, Hillary Clinton ha dejado de lado el lenguaje humanitario y ha adoptado el belicista para explicarnos que:
En cualquier caso, Hillary Clinton ha dejado de lado el lenguaje humanitario y ha adoptado el belicista para explicarnos que:
- Estados Unidos va actuar sin importarle lo que decida el Consejo de Seguridad de la ONU (respuesta estadounidense),
- va a hacerlo recurriendo a su ejército (respuesta fuerte),
- y lo hará para asegurarse una presencia privilegiada en la zona y el control del petróleo libio (respuesta estratégica).
¿Por qué? Pues porque "es mucho lo que está en juego").
Lo mismo opina China, que presenta sus cartas a sucesor del Imperio hegemónico gringo:
Lo mismo opina China, que presenta sus cartas a sucesor del Imperio hegemónico gringo:
"El Gobierno de China ha decidido aprovechar la crisis libia para demostrar a sus ciudadanos y al mundo que es una potencia con todas las letras. No solo ha realizado un importante despliegue para evacuar a sus nacionales del país norteafricano, sino que ha movilizado un navío de guerra y aviones militares para enfatizar que está dispuesta a defender sus intereses, en este caso petroleros".