Según los medios de difusión occidentales la revolución egipcia ha sido posible gracias a Facebook, así que parece lógico que el ejército egipcio haya decidido crear su propio perfil para comunicarse con los ciudadanos.
Según podemos leer hoy en Público:
"Las redes sociales han sido un activo importante en las protestas. Los militares pretenden utilizar este sistema para mejorar la situación actual del país".
Ante lo que sólo se me ocurre que, si realmente les interesan la situación del país y la democracia, deberían empezar por excarcelar a los prisioneros políticos, autorizar las huelgas y garantizar la libertad sindical.
Como señala Vincenç Navarro en su artículo "Lo que no se conoce sobre Egipto":
"Una de las primeras medidas que ha tomado la Junta Militar ha sido prohibir las huelgas y las reuniones de los sindicalistas".
Y, en el Facebook del ejército egipcio, como comentábamos ayer, lo que se transmite es el mensaje de que se acabó el juego:
"Los primeros comentarios de los militares en esta página han tratado de difundir la necesidad de encontrar estabilidad en el país y animan a la población a ayudar a fomentar de nuevo la actividad turística" [PÚBLICO].
Con respecto a la importancia de Facebook en las protestas, señala Vincenç Navarro en el artículo ya mencionado:
"En realidad, la supuesta revolución no se inició hace tres semanas y no fue iniciada por estudiantes y jóvenes profesionales. El pasado reciente de Egipto se caracteriza por luchas obreras brutalmente reprimidas que se han incrementado estos últimos años. Según el Egypt’s Center of Economic and Labor Studies, sólo en 2009 existieron 478 huelgas claramente políticas, no autorizadas, que causaron el despido de 126.000 trabajadores, 58 de los cuales se suicidaron".
En conclusión, y parafraseando a Andrés Calamaro en referencia a Twitter, esto es lo que opino sobre el perfil del ejército egipcio en Facebook (y sobre Facebook en general): "Métanselo en el medio del orto".