miércoles, 29 de febrero de 2012

Leyendo a Rosa Luxemburgo

Opinaba Rosa Luxemburgo, como los marxistas clásicos, que (simplificando mucho) las contradicciones internas del capitalismo generarían tales crisis que terminaría por desmoronarse dando lugar al socialismo.

Poco podía imaginarse que los capitalistas lograrían tapar las grietas del dique de contención empleando el dinero público (los planes de rescate para la banca son solo el ejemplo más evidente entre muchos otros) y que los trabajadores aplaudirían en lugar de revelarse. Porque una condición previa para el cambio revolucionario hacia una sociedad socialista, aunque las propias contradicciones del capitalismo lo hicieran inevitable, era la acción de los trabajadores conscientes.
Y aquí es importante detenerse no solo en "acción", sino también en "conscientes". ¿Cuántos trabajadores hoy día, por su capacidad para tener un teléfono inteligente de última generación (obviando por supuesto las consecuencias de este consumo en otros lugares del mundo), consideran que pertenecen a la clase media globalizada y asumen los valores de un banquero suizo?