Con las noticias que salen cada día sobre Urdangarín, la
Monarquía está tan de moda que pronto el Jefe de la Casa Real será Jorge Javier
Vázquez.
Un argumento habitual para defender la Monarquía borbónica en
el Reino de España es que desde que nos la colaron de rondón con la Constitución
de 1978 hemos disfrutado del más largo período de democracia. Bien, sin entrar
a valorar si esto que estamos disfrutando -unos más que otros- es una
democracia -o más bien algo muy diferente-, conviene recordar algo fundamental:
La II República terminó con un golpe militar perpetrado por los mismos que unos
años después nos colocaron al Juancar. Pretender legitimar la Monarquía con
semejante argumento, por lo tanto, es lo mismo que defender que el recurso a la
violencia es injustificable solo cuando son los demás los que hacen uso -pero
perfectamente legítimo, y fuente de legitimidad, cuando son ellos.